RESUMEN DE LA TERCERA CHARLA DE FORMACIÓN DE CATEQUISTAS.- 20/02/2012
INTRODUCCIÓN
Sabemos que son malos tiempos los que corren para la Iglesia. El mundo está cambiando de una manera desproporcionada si comparamos lo que está sucediendo con lo que hemos vivido en otras épocas no tan lejanas. La Iglesia está sufriendo una persecución encubierta: Supresión de crucifijos en las escuelas, Bodas civiles de personas del mismo sexo, abortos, el NO a la vida, el “relativismo” o interpretación de la Biblia como se quiera, el “ateísmo” abiertamente en contra de Dios, profunda crisis espiritual y de valores humanos…etc.
Hay un desprestigio de la espiritualidad religiosa. Ser creyente católico parece algo desfasado en nuestro mundo de hoy y casi sin importancia. Frecuentar la Iglesia se ve, por algunos sectores, algo vulgar. Por eso, nos toca a los católicos defender esos valores que se van perdiendo y, sobre todo, defender a la Iglesia. Pero, para poder defenderla lo mejor es conocerla a fondo. Vamos a ver brevemente cómo es nuestra IGLESIA.
1.- NOMBRES E IMÁGENES DE LA IGLESIA
El Concilio Vaticano II, en su “Constitución Dogmática sobre la Iglesia” reconoce que ella no tiene otra luz que la de Cristo. Su luz es comparable a la de la Luna, cuya luz es reflejo del Sol.
La palabra “Iglesia” o “ekklèsia”, significa “llamar fuera” y “convocación”. Designa asambleas del pueblo en general de carácter religioso. Ya en el A.T. se le llamó así para nombrar a la asamblea del pueblo elegido. También se llamó Iglesia a la primera comunidad de los que creían en Cristo.
La Iglesia es el verdadero Pueblo de Dios y que vive de la Palabra y del cuerpo de Cristo.
En la Biblia encontramos muchas imágenes y figuras relacionadas que, mediante la Revelación, nos habla de su misterio inagotable. Son imágenes tales como:
• Cristo viene a ser la "cabeza" de este Pueblo de Dios o Iglesia.
• La Iglesia es "redil" cuya única y necesaria puerta es Cristo y el rebaño cuyo pastor es el mismo Dios y al que Cristo guía y alimenta como Buen Pastor.
• La Iglesia es el "campo de Dios" en el que el labrador del cielo plantó una viña, en donde la verdadera vid es Cristo, que da vida y fecundidad a los sarmientos, es decir a nosotros.
• También es "construcción de Dios", por aquello de la piedra angular que desecharon los arquitectos y también es la Jerusalén de arriba y nuestra Madre. Se la describe como la Esposa del Cordero inmaculado, porque Cristo la amó y se entregó por ella para santificarla. A partir de ahora, vamos a fijarnos en estas imágenes para comprender lo que significa la Iglesia en nuestra Fe.
2.- SU ORIGEN Y FUNDACIÓN
La Iglesia fue instituida por Cristo Jesús porque correspondió al Hijo el hecho de llevar a cabo el plan de Salvación de su Padre. Ese fue el motivo de su misión. Comenzó su Iglesia con el anuncio de la Buena Noticia o llegada del Reino de Dios prometido. La Iglesia es el Reino de Cristo presente ya en este misterio. El agua y la sangre que brotaron del costado abierto de Cristo crucificado, son signos de su comienzo y crecimiento.
Acabada la obra que su Padre le encargó realizar en la tierra, fue enviado el Espíritu Santo el día de Pentecostés, para que santificara a su Iglesia y difundiera el Evangelio entre los pueblos mediante la predicación. La Iglesia es convocatoria de salvación para todos y misionera enviada por Cristo a todas las naciones.
3.- MISTERIO DE LA IGLESIA
En la Iglesia es donde Cristo realiza y revela su propio misterio. El desposorio de Cristo con su Iglesia, a la que se une como su esposo, se convierte en verdadero misterio. De este modo, Cristo es el mismo misterio de la Salvación y los Sacramentos por Él instituidos son los signos e instrumentos de los que se vale el Espíritu Santo para distribuir la gracia divina.
Dios quiso santificar y salvar a todos los hombres no aislados, sino quiso hacer un pueblo que le sirviera con vida santa. Eligió a Israel e hizo una alianza con él, lo fue educando y santificando. Esto no es más que la preparación de la alianza nueva y perfecta que iba a realizar Cristo. La de Moisés había sido la alianza antigua. En los corazones de su pueblo habita el Señor y su Ley es el mandamiento nuevo: Amarás a los demás como Cristo nos amó…
La Iglesia tiene es sal de la tierra y luz del mundo y su destino es el Reino de Dios, que él mismo comenzó en este mundo.
4.- IGLESIA CUERPO DE CRISTO
Jesús reveló a sus discípulos el Misterio del Reino, les dio parte de su misión, en su Iglesia y en sus sufrimientos. Les hablaba de comunión íntima: “Yo soy la vid y vosotros los sarmientos…Quien come mi carne y bebe mi sangre… Permaneced en Mí, como Yo en vosotros…”. Cuando ascendió a los cielos no los dejó huérfanos y se quedó con nosotros hasta el fin de los tiempos. Les envió el Espíritu Santo.
Cristo es la Cabeza del Cuerpo que es la Iglesia de la que formamos parte y en el que nos unimos a sus sufrimientos como el cuerpo se une a su cabeza. El Espíritu Santo hace que la Iglesia sea el “Templo vivo de Dios” y le proporciona de unos carismas o gracias espirituales para el bien de los hombres. Luego cada uno hace uso de ellos, como ocurre en la parábola de los talentos.
5.- NOTAS DE LA IGLESIA
La Iglesia única de Cristo está dotada de unos atributos que indican sus rasgos esenciales:
• Es UNA debido a su origen. Toma su modelo en la unidad de un solo Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, en la Trinidad de Personas.
• Es SANTA, ya que Cristo, su fundador, es “el solo Santo” que amó a su Iglesia como a su esposa y se entregó a ella para santificarla. Sus miembros son llamados santos.
• Es CATÓLICA, es decir, UNIVERSAL en el sentido de totalidad. Cristo está presente en ella desde Pentecostés hasta la Parusía.
• Es APOSTÓLICA porque está fundada sobre los Apóstoles. Cristo eligió e instituyó a Doce para que le sirvieran y para enviarlos a predicar. Apóstol quiere decir “enviado”.
Jesús dijo a los Doce y nos lo dice también a nosotros: “Como el Padre me envió, también yo os envío…Quien a vosotros recibe, a mi me recibe… Los Apóstoles se encargaron de instituir a sus sucesores.
6.- LA IGLESIA, INSTITUCIÓN JERÁRQUICA
7.- VOCACIÓN DE LOS LAICOS Y PAPEL DE LA VIRGEN EN LA IGLESIA.
Los laicos son todos los cristianos, excepto los miembros del Orden Sagrado y del estado Religioso de la Iglesia. Son cristianos que están incorporados a Cristo por el Bautismo, que forman el Pueblo de Dios y que participan de las funciones de Cristo. Es tan necesaria su participación que, sin ella, el apostolado de los pastores no podría ser atendido completamente. La Virgen está inseparablemente unida a Cristo que, agonizando en la Cruz, la dio como madre al discípulo: "Mujer, ahí tienes a tu hijo…" La Virgen, presente en la vida de la Iglesia, unida a la obra redentora de su Hijo y al Espíritu Santo, modelo de virtudes, Madre de Dios, Madre de la Iglesia y Madre nuestra.
JOLABE
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