La Liturgia de las Horas u Oficio Divino, es el conjunto de oraciones (salmos, antífonas, himnos, oraciones, lecturas bíblicas y otras)
que la Iglesia ha organizado para ser rezadas en determinadas horas de
cada día. El oficio divino es parte de la liturgia y, como tal,
constituye, con la Santa Misa, la plegaria pública y oficial de la
Iglesia. Su fin es consagrar las horas al Señor,
extendiendo la comunión con Cristo efectuada en el Sacrificio de la
Misa. Quien reza el oficio hace un paro en las labores para rezar con la
Iglesia aunque se encuentre físicamente solo. Aunque sin duda es necesaria la oración privada, también es necesario que recemos formalmente unidos como Iglesia.
Los sacerdotes, religiosos y religiosas tienen obligación de rezar el Oficio Divino.
Las horas del oficio divino: Estas horas se llaman "horas canónicas".
Recuerde que no es necesario para los laicos rezarlas todas para participar de esta oración. Pueden reducir el oficio a estas dos horas: Los Laudes antes de ir a trabajar y las Vísperas al terminar los trabajos.
Recuerde que no es necesario para los laicos rezarlas todas para participar de esta oración. Pueden reducir el oficio a estas dos horas: Los Laudes antes de ir a trabajar y las Vísperas al terminar los trabajos.